baja autoestima

La baja autoestima es un problema generalizado que afecta a millones de personas en todo el mundo y repercute en su bienestar mental, sus relaciones y su calidad de vida en general. Se manifiesta de diversas formas, desde un discurso negativo sobre uno mismo hasta el retraimiento social y el perfeccionismo. Primero explicaremos por qué es importante hablar sobre este tema:

¿Por qué hay que hablar de la baja autoestima?

Reconocer los signos de la baja autoestima es crucial para embarcarse en un viaje de autodescubrimiento y construir un sentido más saludable de la autoestima. Una baja autoestima puede tener un impacto significativo en nuestra vida y puede desembocar en consecuencias a largo plazo, como síntomas de depresión o ansiedad. En este artículo, hablaremos sobre seis indicadores de que una persona podría tener baja autoestima y ofreceremos estrategias prácticas para identificarlos y abordarlos.

Comprendiendo estas señales y tomando medidas proactivas, podrás recuperar la confianza en ti mismo y adoptar una forma de vida más empoderada.

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Diálogo interno negativo

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El diálogo interno puede decir mucho sobre cómo nos percibimos a nosotros mismo. Cuando es negativo, es como una nube de tormenta que nos persigue allá donde vamos, haciendo llover autocrítica y dudas. Las personas con baja autoestima a menudo se encuentran atrapadas en un ciclo de diálogo interno negativo, constantemente criticándose y centrándose en sus defectos. Este dañino patrón de pensamiento destruye con el tiempo la confianza en uno mismo y perpetúa los sentimientos de no ser suficiente.

Para combatir el diálogo interno negativo, empieza por cuestionar esos pensamientos destructivos. Sustituye las afirmaciones autocríticas por afirmaciones positivas que te recuerden tus puntos fuertes y tus logros. Rodéate de personas que te apoyen y te animen. Con el tiempo, practicar la autocompasión y la gratitud puede ayudar a silenciar al crítico interior y fomentar una relación más enriquecedora con uno mismo.

Entre nuestros recursos de salud mental gratis encontrarás un efectivo ejercicio para desafiar los pensamientos intrusivos y ponerlos en perspectiva.

Retraimiento social

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Aislarse del resto es un mecanismo de afrontamiento habitual en las personas con baja autoestima. El miedo a ser juzgado o rechazado puede llevar a las personas a evitar por completo las situaciones sociales, reforzando aún más los sentimientos de soledad y afectación. Este aislamiento autoimpuesto puede aumentar los sentimientos de soledad y disminuir las oportunidades de establecer vínculos significativos.

Para superar el retraimiento social, ayuda exponerse gradualmente a entornos sociales en los que uno se sienta seguro y apoyado. Empieza con pequeños pasos, como asistir a una reunión con un amigo de confianza o unirse a un grupo con intereses comunes. Establecer vínculos sociales positivos puede ayudarte a aumentar tu confianza y te dará una red de apoyo para afrontar situaciones difíciles.

Dificultad para establecer límites

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Las personas con baja autoestima suelen tener dificultades para establecer límites y decir que no, por miedo a que hacer valer sus necesidades provoque conflictos o rechazo. Sin embargo, establecer límites saludables es vital para preservar el bienestar y fomentar el respeto por uno mismo. Esta dificultad para establecer límites puede dar lugar a sentimientos de resentimiento y autodesprecio, aumentando aún más la baja autoestima.

Para hacer frente a este problema, practica la asertividad, respetando tus propios sentimientos y preferencias, incluso si eso significa decepcionar a los demás. Busca el apoyo de tus seres queridos o de un terapeuta para desarrollar habilidades de comunicación eficaces y ganar la confianza para defenderte a ti mismo.

Perfeccionismo

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El perfeccionismo suele ir de la mano de una baja autoestima, ya que las personas se imponen unos niveles de exigencia imposiblemente altos y se vuelven excesivamente críticos cuando se quedan cortos, volviendo al diálogo interno negativo. Esta búsqueda imparable (e imposible) de la perfección puede provocar estrés crónico, agotamiento y disminución de la autoestima.

Adopta el concepto de “suficientemente bueno” y celebre el progreso en lugar de la perfección. Recuerda que la autoestima no está vinculada únicamente a los logros o a la validación externa. Rodéate de personas que te apoyen y te valoren por lo que eres, no sólo por lo que consigues. Al dejar de lado las expectativas poco realistas y aceptar tus imperfecciones, puedes cultivar una visión más equilibrada y compasiva de ti mismo.

Falta de asertividad

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La dificultad para expresar pensamientos y emociones es un reto común para quienes luchan contra la baja autoestima. Esta falta de asertividad puede provocar sentimientos de impotencia y frustración en las relaciones personales y profesionales. Aprender a reafirmarse es esencial para aumentar la confianza y la autoestima. Practica expresarte utilizando frases con “yo” y centrándote en hacer valer tu punto de vista, siempre de una manera respetuosa. Busca el apoyo de un terapeuta o inscríbete en programas de formación para poder aprender a tener una comunicación asertiva, cuya importancia para poner límites vimos en el punto 3.

Comportamientos autodestructivos

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Los comportamientos autodestructivos muchas veces sirven como un mecanismo de afrontamiento equivocado para las personas con baja autoestima, ya que les da un alivio temporal de las emociones negativas, pero a la larga mantiene un ciclo de autosabotaje. Estas actividades perjudiciales pueden incluir el abuso de sustancias, los trastornos alimentarios, las autolesiones y los comportamientos sexuales de riesgo. Si tiendes a hacer alguna de estas actividades o alguna persona cercana las hace, busca ayuda de profesionales de la salud mental especializados en el tratamiento de conductas adictivas o autolesiones. Ellos pueden proporcionar orientación, apoyo y estrategias eficaces para superar estos patrones destructivos y desarrollar mecanismos de afrontamiento más saludables.


Reconocer los signos de baja autoestima es el primer paso para recuperar la autoestima y la confianza en uno mismo. Desafiando el diálogo interno negativo, superando el retraimiento social, estableciendo límites saludables, aceptando la imperfección, practicando la asertividad y buscando ayuda para los comportamientos autodestructivos, puedes trabajar en tu autoestima y superar las limitaciones que la baja autoestima nos impone. Recuerda que la construcción de la autoestima es un viaje que requiere paciencia, autocompasión y el apoyo de tus seres queridos y de profesionales de la salud mental. Abraza el poder que hay en ti para redefinir tu autoestima y vivir una vida más plena.

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